BLOG DE HISTORIA 1º BACHILLERATO

Prof. Luis Pérez-Cea Soto

domingo, 22 de abril de 2012

LA GUERRA FRÍA


I – LOS ORÍGENES DE LA GUERRA FRÍA

El final de la II Guerra Mundial tiene un significado mucho más profundo que la mera derrota de las potencias del Eje.  La denominada Guerra Fría entre EEUU y la URSS y sus respectivos bloques será la tónica de las relaciones internacionales durante prácticamente medio siglo.

La unión durante la guerra enmascaró la heterogeneidad de la coalición en muchos planos de las ideologías político-sociales.  Sin embargo la ruptura no fue inmediata, por  un lado Stalin necesitaba reconstruir su país, difícil sin el concurso del resto de las potencias, y además contaba con Estados Unidos en la cuestión de las reparaciones de guerra. Por otro, el espíritu de Yalta suponía una colaboración entre las dos superpotencias pese a sus sistemas ideológicos diferentes.  Es más, en países con una fuerte tradición democrática las fuerzas de la izquierda ganaban popularidad como se demuestra en el resultado de sus respectivos comicios.

Sin embargo el mundo se dirigía hacia un sistema bipolar:

a)     Geografía: el bloque occidental gira en torno al Atlántico que aglutina a América del Norte y Europa occidental, mientras que el bloque oriental tiene una conformación continental con mayor población que el anterior.
b)    Ideología: Son dos concepciones antagónicas, la socialista y la de tradición liberal individualista.
c)     Economía: dos sistemas, uno de economía de mercado y el otro de economía planificada.

Estas características generan tres consecuencias:

·        Plantea un conflicto Este-Oeste
·        Da lugar a un sistema de alianzas en torno a los dos grandes
·        Implica a la mayoría de países, los cuales se esfuerzan en integrarse en uno de los dos bloques.

En un primer momento del proceso que derivará en ruptura de bloques, el espacio donde se proyectan las divergencias ideológicas es Europa Central, con una clara ventaja de la URSS por cuanto está más cercana al territorio  que Inglaterra (además preocupada por la disolución de su imperio) y que Estados Unidos pendiente de la presión de la opinión pública norteamericana  en el tema de la desmovilización de sus tropas que cuando se produzca favorecerá el desequilibrio de Europa a favor de la URSS.

El año 1946 representa la primera fase de enfrentamiento para llegar a una ruptura al año siguiente.  Efectivamente, es en 1947 cuando Truman detiene la repatriación del ejército y procede al rearme.

Nada más iniciarse el año 1946 se produce un primer incidente diplomático en el seno de la ONU motivado por el mantenimiento de la ocupación soviética de las provincias del norte de Irán, lo que motiva la protesta de la delegación iraní y la subsiguiente presión estadounidense.  Los rusos se retiran en pocos meses.

G.Kennan
Los siguientes acontecimientos suponen el colapso de las relaciones.  Por un lado el descubrimiento de una red de espionaje soviética en Canadá y por otro el “telegrama Kennan” y el “telegrama Novikov”.  En ambos se ponía de manifiesto la hostilidad creciente.  Kennan afirmaba que la URSS era un estado expansionista y hostil a occidente, mientras que Novikov afirmaba la intención norteamericana de dominar el mundo aun a costa de una nueva guerra.  Finalmente las guerras civiles de Grecia y China, enfrentando a comunistas y conservadores, más las problematicas relaciones diplomáticas en Alemania, desembocan en el fin de la alianza de la guerra.

El año 1947 es el de la ruptura.  Una Europa por reconstruir, una sociedad desestructurada tras la guerra y la violación soviética del acuerdo sobre la Europa Liberada tomado en Yalta suponen el inicio de la guerra fría.  La doctrina Truman y el Plan Marshall lo pondrían de manifiesto.


II – LA DOCTRINA TRUMAN Y EL PLAN MARSHALL

La mutua desconfianza aumenta desde marzo de este año cuando el Presidente Truman solicita al Congreso una ayuda de 400 millones de dólares para Grecia y Turquía, relevando a Inglaterra que estaba actuando en Grecia, amenazada por la subversión interior de la guerrilla comunista y apoyando a Turquía amenazada por la URSS en su política de expansión buscando una salida al mar por los Dardanelos.

Truman no solo solicita ayuda económica sino también la implicación de Estados Unidos apoyando a todo gobierno que luche contra el comunismo. Esta es la esencia de la “doctrina” y una nueva forma de encarar la política exterior, y en esta línea debe inscribirse la exclusión de los ministros comunistas de los gabinetes francés e italiano y posteriormente del belga y danés.  No olvidemos que Europa está destrozada por la guerra y que la agitación social alentada por los partidos comunistas podría servir de punta de lanza para una intrusión soviética en el bloque occidental.

Precisamente, la necesidad de dotar a Europa de un programa adecuado de reconstrucción es el motivo por el cual el secretario de Estado norteamericano G.Marshall expuso en la Universidad de Harvard la necesidad de ayudar económicamente a Europa mediante un programa “gratuito” cuyo fin último era la lucha contra el comunismo y el control, indirecto, de las economías de aquellos países que se acogieran al plan.

En la conferencia de Paris se propuso que la ayuda recayera en todos los países europeos, incluyendo los vencidos, dejando fuera a España.  La oposición soviética fue inmediata aduciendo que el programa era una clara subordinación a los Estados Unidos.  Stalin obligó a los países bajo su órbita a rechazar la ayuda y como respuesta nació, en octubre de 1947, el Kominform (Oficina de Información Comunista) órgano vinculante de los países con regímenes comunistas y representantes de partidos comunistas de otros regímenes.

El plan se pone en marcha y Europa recibirá la cantidad de 13.000 millones de dólares entre 1948 y 1952.  Pero el alcance no es en realidad solamente esta aportación económica sino que subyacen tres hechos importantes:

Asignacion Plan Marschall


·        Estados Unidos abandona el aislacionismo
·        Se vuelca sobre Europa
·        Estimula la unión europea

Si el plan Marshall y la doctrina Truman confirman la división en dos bloques, la posterior firma del Pacto del Atlántico cristalizaba la guerra fría.
A pesar de ello, la amenaza de expansión comunista hizo que en Europa occidental nacieran dos importantes instituciones:

·        El 17 de marzo de 1948 nace la Unión Europea Occidental.  Tiene un carácter defensivo y está formada por Francia, Gran Bretaña, Italia y los países del Benelux.
·        En abril de 1949 Estados Unidos crea la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) formado por los países de la Unión Europea, Portugal, Canadá y otros que se irán incorporando más tarde.


III – EL INICIO DE LA GUERRA FRÍA. CONFLICTOS Y EVOLUCIÓN

La guerra fría no es solo un momento histórico sino que es un largo proceso que iniciado en Europa se extiende progresivamente al resto del mundo con focos muy centralizados y “calientes” que van a dominar prácticamente la esfera internacional de las relaciones diplomáticas durante años, a pesar de existir períodos importantes de distensión, la llamada coexistencia pacífica.

1º.- Los Conflictos durante la Guerra Fría

A)  Las Democracias Populares

Las divergencias ideológicas dimanantes de los telegramas Kennan y Jdanov crean un estado de inseguridad latente en el continente europeo.  La doctrina Jdanov había impuesto un sistema político, económico e ideológico en Europa central y oriental, el modelo staliniano: socialización de los medios de producción, colectivización del campo, centralización y planificación económica, militarización y persecución de cualquier idea contraria. 

El proceso de expansión e imposición ideológica soviética fue rápido teniendo en el llamado “Golpe de Praga” (1948) se punto álgido.

Checoslovaquia era el único país de los liberados y ocupados por los soviéticos que tenía una cierta tradición democrática como se vio claro en las elecciones que elevaron a la presidencia a E.Benes, sin embargo contaban con un fuerte partido comunista que participaba en el gobierno de coalición.  Las próximas elecciones de 1948 podían hacer tambalear el poder del partido comunista y la aceptación del Plan Marshall por Checoslovaquia (obligada por Stalin a renunciar) promovieron un golpe de estado comunista.  El poder que tenía del grupo comunista del gobierno sobre las fuerzas de seguridad del Estado quedo claro cuando el ministro del interior nombró comisarios comunistas.  Este hecho provocó la dimisión de los ministros demócratas creyendo que esta actitud de fuerza iba a paralizar la acción soviética.  Fueron sustituidos por ministros comunistas.

 “Con la bendición de Stalin, el líder comunista checoslovaco Klement Gottwald  declaró el 24 de febrero la huelga general. Se crearon  "Comités de Acción" por todo el país que, apoyados por una "Milicia de Trabajadores" acabaron pronto con cualquier resistencia democrática.

El 25 de febrero, Benes tuvo que aceptar la constitución de un nuevo gobierno dominado por los comunistas.    Benes abandonó la presidencia en mayo y en junio de 1948 los liberales fueron expulsados del gobierno. Checoslovaquia era ya una democracia popular".


Mariscal Tito
Otro de los grandes problemas con que se encontró Stalin dentro de su feudo político fue la Yugoslavia de Tito.  Era un país cuya guerrilla (comunista) había conseguido vencer a las tropas alemanas con muy poca ayuda soviética.  Tras la guerra el choque con Moscú era evidente tras su decisión de llevar a cabo una política exterior independiente.  El apoyo de una población unida fue vital para el desarrollo político de este país.  La consecuencia de este hecho repercutió directamente en el resto de las “democracias populares” sometidas a nuevas purgas de depuración por parte de Stalin.


B)   EL BLOQUEO DE BERLÍN

Alemania es uno de los pivotes sobre los que bascula la guerra fría.  Su ocupación tras la guerra conlleva dos formas divergentes de actuación: flexibilidad en la zona de ocupación franco-anglo-americana y absorción de la zona oriental en la esfera totalitaria.  Este hecho culminará en la creación de dos entidades políticas diferentes: La República Federal Alemana y la República Democrática Alemana.


Berlín, al ser un espacio situado en pleno corazón de la zona de ocupación soviética y estar dividido, a su vez, en dos zonas de ocupación, solamente se podía comunicar con los territorios administrados por los aliados mediante tres pasillo aéreos y una carretera.  Desde este punto de vista, los rusos tenían los medios suficientes para forzar la integración de la ciudad en el área de influencia del Este.
Berlín

Los aliados occidentales (EE.UU, Gran Bretaña y Francia) tras los Acuerdos de Londres (abril a junio 1948) en donde se decidió el inicio de un proceso constituyente en sus zonas de ocupación, crearon una nueva moneda, el Deutschemark, para sus zonas de ocupación, incluida Berlín.  La respuesta soviética fue el bloqueo de la ciudad prohibiendo el uso de las vías terrestres para abastecer a la población.   La respuesta estadounidense fue establecer un puente aéreo que durante un año (junio de 1948 hasta junio de 1949) suministró más de dos millones y medio de toneladas en víveres.

Una de las principales consecuencias de este hecho fue el inclinar definitivamente Alemania del Oeste del lado de los occidentales y facilitó la formación de la República Federal Alemana dotada con una Constitución que sancionaba un sistema liberal democrático.